El desarrollo de nuevas tecnologías ha alcanzado
prácticamente a todo el desarrollo humano. En el caso de la psicología clínica,
ha significado nuevos avances en el conocimiento, evaluación y tratamientos
psicológicos de diferentes problemas y trastornos. En este trabajo se revisan
cuatro desarrollos que han tenido una expansión importante: el uso de internet
para el tratamiento psicológico, el uso de la realidad virtual, el
neurofeedbacky la estimulación magnética transcraneal. Se presenta brevemente
cada técnica o procedimiento, su aplicación a problemas concretos, sus ventajas
y sus inconvenientes. Finalmente se discute el desarrollo de estos recursos y
la necesidad de seguir aportando conocimientos que vayan mejorando su eficacia
y su eficiencia, de acuerdo con tipos de pacientes, patologías, procedimiento
específico, así como evitar efectos indeseables.
Los nuevos desenvolvimientos tecnológicos aplicados a tratamientos
psicológicos
La psicología, como cualquier otra disciplina, ha mantenido
una relación estrecha con los avances tecnológicos, tratando de utilizar esos
avances en la mejora del desarrollo de la investigación y de sus aplicaciones
prácticas. Muchos procedimientos en investigación básica y aplicada se han
visto beneficiados del desarrollo de procedimientos de medición y evaluación
más precisos y rigurosos (presentación de estímulos, medidas de tiempo de
reacción, movimientos oculares, potenciales evocados, mapeo cerebral, entre
otros), dando lugar no sólo a un conocimiento más cabal, sino a nuevos avances
en el conocimiento (Norris, 2002).
Un aspecto importante de la psicología aplicada,
la evaluación y el tratamiento de problemas mentales, también se ha visto beneficiada
de estos avances, proporcionando en algunos casos nuevos modos de evaluación y
tratamiento psicológico, así como nuevos desarrollos terapéuticos. Estos
avances se han visto especialmente incrementados con la aparición de las
tecnologías de la comunicación, siendo la telesalud/la telepsicología una de
las más prometedoras líneas de investigación hoy día en la psicología clínica y
de la salud. Sin embargo, no todas las aplicaciones clínicas de las nuevas
tecnologías se agotan en la telepsicología, destacando también nuevas
aplicaciones y nuevos desa-rrollos terapéuticos como el uso de la realidad
virtual, la realidad aumentada, el uso de las presentaciones en 3D, la estimulación
magnética transcraneal o los nuevos desa-rrollos del biofeedback.Lo que sigue a
continuación es una ilustración de es-tos nuevos desarrollos dentro del ámbito
de la psicología clínica, dirigiéndonos específcamente a los avances más
destacados y con mayor atención en la investigación. En este sentido,
revisaremos el uso de la telepsicología, el uso de la realidad virtual, el
neurofeedback, y la estimulación magnética transcraneal.Telesalud y
telepsicologíaLa telesalud es el término que defne el uso de las tec-nologías
de la inFormación y la comunicación (TICs) para Facilitar el acceso a la
evaluación de la salud, el diagnóstico, la intervención, la consulta, la
supervisión, la educación y la inFormación a distancia (Landa-Durán, 2009;
Nickelson, 1998; Peñate, 2012). El término telesalud incluye varios recursos
como la telemedicina, la telepsiquiatría o la telepsi-cología.
A continuación,
se detallan algunas características de las tareas principales que componen la
telepsicología: la evaluación, la psicoeducación, los programas de
entre-namiento y el tratamiento psicológico.El uso de internet como herramienta
para la (i) evaluación psicológicaha crecido considerablemente. Actualmente, se
encuentran multitud de sitios webque oFrecen evaluación psicológica online.
Este procedimiento tiene ventajas claras. Sin embargo, la validez de las
pruebas empleadas, la Falta de control de la relación terapéutica y la ausencia
de un proceso complejo de toma de decisión a la hora de emitir un diagnóstico
puede facilitar la aparición de errores Tipo I y Tipo II. Las personas
particularmente vulnerables pueden ser víctimas de la Falta de inFormación
(Falsos positivos) o la falta de claridad sobre el complejo proceso de toma de
decisión en el diagnóstico.Dentro de las páginas webrelacionadas con la
telepsico-logía, la (ii) psicoeducaciónrepresenta el mayor volumen. En estas
páginas se recoge información sobre diferentes patologías, sus características,
curso y alternativas terapéu-ticas. A pesar de que desde un punto de vista
meramente inFormativo, estas páginas pueden ser muy útiles, no existe evidencia
a Favor o en contra de este tipo de inFormacio-nes generales (Norris, 2002;
Peñate, 2012). Además, la inFormación sobre el curso, la gravedad y la
cronicidad de la enFermedad puede tener un impacto negativo en la confanza y la
seguridad de los pacientes (Peñate, 2012).
Las páginas websobre (iii) técnicas y procedimientos
específcos para el entrenamiento conductual son también muy frecuentes. Este
tipo de programas facilitan el entre-namiento sobre un sinfín de técnicas y
recursos (relajación, respiración, mindFulness, autoinstrucciones, entre
otros), que pueden facilitar el trabajo terapéutico. De nuevo, no hay datos que
avalen estos recursos, pero los pacientes pueden utilizar estos entrenamientos
por su cuenta y emplear el tiempo ahorrado en el desarrollo de la relación
terapeuta-paciente. Sin embargo, la calidad y el enfoque de estos recursos es
muy diversa, lo que puede confundir e incluso perjudicar a los pacientes.Con todo,
lo que mayor interés ha despertado en el uso de la telesalud asociado a la
psicología son los aplicativos diseñados para facilitar el (iv) tratamiento
psicológico. Por su importancia, lo desarrollamos a continuación.Tratamiento
psicológico vía internetEl tratamiento psicológico por internet representa una
nueva forma más rápida y Fexible de los denominados tratamientos basados en el
manual, cuya eficacia se ha demostrado empíricamente (Wilson, 1996). En general,
estos tratamientos incluyen componentes ya comentados relativos a
psicoeducación sobre el trastorno objetivo del tratamiento, la evaluación
psicológica y los componentes de la terapia (con una secuencia predeterminada).
Aunque los programas por internet tienen un diseño muy claro, son muy diversos
(Nelson, Bui & Velásquez, 2011; Titov, 2007). Esta diversidad se puede
concretar en los siguientes aspectos: la duración del tratamiento (que varía de
10-15 minutos a más de 10 semanas); la presentación (que aunque normalmente es
a través de audio y texto, puede incluir imágenes y videos); la prestación del
servicio (que oscila desde una estrategia interactiva online a un recurso con
acceso regulado, en ocasiones sujeto a una tarifa); los comentarios del
terapeuta (que se pueden presentar en línea o a través de correo electrónico.
Nuevas tecnologías y tratamientos psicológicos
El uso del neurofeedback.La técnica de biofeedback es un
método tradicional de tratamiento durante el cual los pacientes toman
conciencia y aprenden a controlar su propia fisiología, con el objetivo de
mejorar tanto su salud física como su salud psicológica. El neurofeedback(NF,
por sus siglas en inglés), es una subespecialización del biofeedback, también
llamado biofeedbackEEG. Utiliza la electro-encefalografía (EEG) del paciente como
retroalimentación para modificar los patrones de actividad eléctrica cerebral
(Larsen & Sher-lin, 2013), sin la introducción de actividad eléctrica o
magnética, o compuestos farmacológicos, evitando, por lo tanto, que el cerebro
se vuelva dependiente de influencias externas para mejorar su funcionamiento
(Niv, 2013). La actividad cerebral del paciente se mide con un electrodo que
incorpora un código de letras y números para identificar el lóbulo y la
ubicación del hemisferio, respectivamente. Los mecanismos por los cuales
funciona se suelen vincular a los mecanismos clásicos del condicionamiento
operante de aprendizaje que entrenan el cerebro para mejorar la regulación del
mismo, proporcionándole información (vi-sual, auditiva y/o táctil) en tiempo
real (Lofthouse, Arnold, Hersch, Hurt & DeBeus, 2012).
El origen del NF
está directamente relacionado con la primera demostración de condicionamiento
operante EEG. Sterman y colaboradores condujeron una serie de estudios en el
contexto de la investigación sobre el sueño, en los que investigaban la
supresión aprendida de una respuesta de presión de palanca en gatos
recompensada de manera previa con comida (Roth, Sterman & Clemente, 1967).
Los investigadores observaron un ritmo electro-encefalográfico sobre la corteza
motora con una frecuencia específica. Al entrenar a los gatos para producirlo
voluntariamente, mediante la contingencia con una recompensa comestible,
consiguieron la autorregulación del EEG (Sterman & Egner, 2006).
Posteriormente, esta investigación ha sido extrapolada con éxito a los seres
humanos, modi±cándose determinados patrones cerebrales y sus correlatos comportamentales
(Sterman & Egner, 2006).Durante el entrenamiento en NF, el paciente está
sentado visualizando un ordenador (se pueden utilizar juegos, rompecabezas,
secuencias de imágenes, etc.). Es importante que el paciente esté motivado para
ver la tarea, así como que perciba los objetivos de la retroalimentación como
ejercicios especiales para el cerebro (Sterman & Egner, 2006). El objetivo
del tratamiento con NF consiste en seleccionar la actividad cerebral que
queremos alterar, dependiendo de los síntomas del paciente y de su patrón de
actividad cerebral. Se espera que cambiando la actividad cerebral y el
funcionamiento cognitivo del paciente cambie el comportamiento (Breteler,
Pesch, Nadorp, Best &Tomasoa, 2012). En definitiva, podríamos decir que el
NF identi±ca patrones anormales detectados en el EEG y los modifica mediante
condicionamiento operante (Mustaca, 2003). Efectividad del neurofeedback. De
acuerdo con algunas revisiones y metanálisis (Dias & van Deusen, 2011;
Gevensleben, Rothenberger, Moll & Heinrich, 2012; Larsen & Sherlin,
2013; Lofthouse et al., 2012; Moriyama et al., 2012), el NF parece ser eficaz
en el tratamiento de TDAH, epilepsia, y en trastornos de ansiedad. También se
han aportado datos sobre la eficacia en lesiones cerebrales traumáticas,
alcoholismo/abuso de sustancias e insomnio. Donde la evidencia de su eficacia
es insuficiente ha sido en los trastornos depresivos, el trastorno por estrés
postraumático, tinitus y autismo (Coben, Linden & Myers, 2010; Holtmann et
al., 2011).